En el día a día, muchas personas llegan a consulta psicológica diciendo:
“Sé lo que tengo que hacer, pero no puedo empezar”,
“Se me olvidan cosas importantes”,
“Cambio de tarea y me pierdo”,
“Me siento agotada por decidir todo el tiempo”.
Estos no son simples despistes ni falta de motivación. Muy a menudo están relacionados con un conjunto de procesos mentales esenciales llamados funciones ejecutivas. Entender cómo funcionan es clave para mejorar la salud mental, el rendimiento académico y la calidad de vida, especialmente en personas con TDAH, autismo, ansiedad, depresión o trauma.
Las funciones ejecutivas son procesos mentales que nos permiten organizar, planificar, tomar decisiones, controlar impulsos, regular emociones y adaptarnos a los cambios. Son como el sistema operativo del cerebro: no hacen el trabajo por sí mismas, pero permiten que todo funcione de forma coordinada.
Estas funciones se desarrollan en el lóbulos prefrontales del cerebro y son especialmente sensibles a factores como el sueño, el estrés, la sobrecarga cognitiva o estados emocionales intensos.
Desde la psicología clínica y educativa, comprender las funciones ejecutivas nos permite:
Una forma clara y educativa de entender las funciones ejecutivas es el modelo de José Antonio Marina y Carmen Pellicer, que habla de la inteligencia que aprende: la capacidad de dirigir nuestro pensamiento y comportamiento de forma consciente. Estas son sus 11 funciones principales:
Mantener un nivel adecuado de energía y alerta para iniciar tareas.
Focalizarse en lo importante y evitar distracciones.
Mantener el esfuerzo aunque la recompensa no sea inmediata.
Comprender y gestionar las emociones propias y ajenas.
Frenar respuestas automáticas y actuar con reflexión.
Sostener y manipular información de manera temporal.
Saber cuándo parar, cuándo seguir, y cómo recuperar recursos mentales.
Planificar, revisar y mejorar el propio proceso de aprendizaje.
Pensar sobre cómo pienso, aprender sobre cómo aprendo.
Iniciar, mantener y modificar una acción en función del contexto.
Coordinar todas las funciones anteriores para lograr objetivos personales y sociales.
En consulta psicológica o en contextos educativos, es frecuente ver:
En consulta psicológica, trabajamos con estrategias como:
La inteligencia no es solo saber cosas, es saber cómo usar lo que sabemos para vivir mejor. Entender las funciones ejecutivas no solo es útil en psicología, es una herramienta de empoderamiento personal.
Como psicóloga especializada en neurodivergencias y procesos de autorregulación, puedo ayudarte a identificar y entrenar estas funciones desde una mirada respetuosa, actualizada y basada en evidencia.
📩 Escríbeme si quieres más información sobre sesiones, talleres o materiales personalizados.